Jordi Adell
Esta sección se titula "webmaster", pero, ¿qué es un "webmaster"? Cuando nos conectamos a un servidor World-Wide Web y recorremos sus páginas y secciones, pocas veces caemos en la cuenta que tras las imágenes, botones, textos y "links" hay una o varias personas que dedican su tiempo a diseñar, realizar y mantener dichas páginas. Parece como si los servidores crecieran en los árboles. Hay muchísimos por los que navegar y normalmente las personas están en un discreto segundo plano respecto a la información: sus nombres y direcciones electrónicas aparecen al final de la página o sólo cuando falla algo. En ocasiones, ni siquiera aparecen sus nombres: un "link" a una dirección electrónica genérica como <webmaster@algun_lugar.es>. Sin embargo, tras las páginas por las que navegamos, a veces con desinterés, existen personas que han dedicado muchas horas a componer y poner en línea esas páginas: son los "webmasters".
En principio, un "webmaster" es la persona que está al frente de un servidor WWW. Es decir, el culpable de todo lo que va mal. Pero, ¿qué hace realmente un webmaster?
Ahora que la Internet ya no es un pasatiempo de gurus informáticos y que las empresas comienzan a exporar las inmensas posibilidades que ofrece, los webmasters, sobre todo los experimentados, son piezas cotizadas. ¿Dónde puede conseguirse un webmaster?
En este artículo se intenta responder a estas cuestiones. Pero antes de entrar en materia es necesario aclarar algunos aspectos. El primero es que la Internet (y la WWW) es un nuevo medio de comunicación. No se trata de la televisión, ni de la prensa. Es un medio diferente, con sus propias normas. Diseñar y mantener un servidor WWW (y conseguir que sea utilizado) es diferente a difundir folletos, realizar vídeos, montar oficinas de información, editar un revista o cualquier otra tarea que emplee canales clásicos de comunicación. La Internet tiene su propia dinámica y el hipermedia una semántica y retórica que implica una forma nueva de pensar y trabajar con la información y los usuarios. La proliferación de servicios electrónicos de información avala su utilidad y rentabilidad.
La segunda cosideración previa es que existen diversos tipos de servidores WWW, y no me refiero al software utilizado sino al tipo de servicio que se intenta prestar. Desde el servidor de un grupo de investigación o departamento universitario, que contiene información sobre las actividades docentes e investigadoras de varios profesores (más la consabida colección de "links" relacionados con el tema), hasta el servidor comercial que ofrece páginas en alquiler a gran cantidad de empresas, pasando por el servidor de una gran empresa que ofrece información corporativa y servicios a sus clientes, existe toda una gradación de tipos de servicio con necesidades, prestaciones y requerimientos diferentes. Es evidente que algunas de las tareas que realizará un webmaster en cada nivel o tipo de organización diferirán considerablemente.
Pese a que se suele utilizar el singular para designar al webmaster, lo habitual (sobre todo cuando se trata de un servidor que aspira a un cierto nivel de calidad y/o contiene bastante información) es que haya varias personas encargadas de su administración y funcionamiento. Una división habitual del trabajo es la siguiente: una o varias personas se encargan de las tareas relacionadas con la informática, otra (u otras) se encargan de las tareas relacionadas con la información que contiene el servidor.
Si el servicio de información es corporativo y precisa la participación de diferentes departamentos (una empresa o una Universidad, por ejemplo), deberá realizar funciones tan variadas como evangelizar a los proveedores remisos a aportar la información necesaria, formar usuarios e incitarlos para que utilicen el servidor, diseñar y elaborar recomendaciones y prescripciones para el tratamiento de la información, comprobar periódicamente la vigencia de la información y de los "links" externos e internos, coordinar a los proveedores de información, procesar el "feedback" de los usuarios, etc. Posiblemente también tenga que buscar recursos materiales para el servicio y coordinar el trabajo de un equipo de editores e incluso de un diseñador grafico (que suele empeñarse en hacer GIFs de 450 Kbytes. a la más mínima).
No debe subestimarse la importancia y la rentabilidad de que el webmaster esté al dia sobre nuevos desarrollos e ideas (nuevos agentes de usuario y servidores, Java, VRML, HTML 3.0, etc.). Para ello es imprescindible la lectura de varios grupos de News, listas de distribución y documentos electrónicos. También debe probar nuevas herramientas y espiar lo que hacen los webmasters de la competencia. Si se decide que el servidor contenga colecciones organizadas de "links" a información externa relevante, la búsqueda de dicha información también ocupará parte de su tiempo.
Otra área de trabajo es la relación con los usuarios. Detectar sus necesidades y expectativas y "procesar" las sugerencias de los usuarios es imprescindible. Un servidor WWW pretende solventar una necesidad informativa, bien interna a la organización, bien externa (clientes, usuarios, alumnos, ciudadanos, etc.). Identificar los intereses de los usuarios-objetivo es fundamental en el proceso de diseño e implementación, pero es necesario revisar constantemente dichas necesidades y reorientar el proyecto a medida que se va desarrollando. Los expertos desaconsejan pretender abarcarlo todo el primer dia. Parece aconsejable dirigir el servicio a un grupo de usuarios, con necesidades claramente establecidas, e ir ampliando la perspectiva poco a poco.
En los servicios diseñados para uso interno, una misión que realizan los webmasters es la formación de usuarios. Los seminarios o cursillos, la elaboración de materiales formativos, la distribución e instalación de kits de software, la solución de problemas por telèfono ("hot line"), etc. son responsabilidad habitualmente del webmaster.
El webmaster también es responsable de que los usuarios potenciales conozcan la existencia del servicio de información. Si se trata de un grupo localizado es fácil: memoranda, notas de prensa, etc. Si los usuarios están dispersos en la Internet, los servicios de páginas amarillas, los grupos de News relacionados, las listas de distribución especializadas, los robots y arañas, los catálogos de recursos, etc, son los medios al uso. Un webmaster que no se preocupe de que sus usuarios potenciales conozcan y uticen el servidor que administra es un mal webmaster. Entre las decenas de miles de servidores existentes, ¿cómo van a encontrar el suyo los interesados? ¿Por accidente? ¿Haciendo zapping? Por tanto, es conveniente registrar el servidor en los sitios en los que los usuarios buscarán información. Pero, atención con la publicidad y el marketing en la Internet: el webmaster debe ser un buen conocedor de los usos y costumbres de la red (la "etiqueta") para no sobrepasar el nivel aceptable en la difusión de su servicio.
El administrador ideal del sistema, el webmaster técnico perfecto, debe ser tan invisible como sea posible. Su misión es mantener el servidor accesible 24 horas al dia. Los usuarios del servicio sólo se relacionan con el administrador cuando algo no funciona. En cambio, el administrador de la información debe ser tan "ruidoso" como pueda: debe dar a conocer el servidor a los usuarios potenciales (locales o remotos), debe perseguir a los proveedores de información para que aumenten, mejoren y actualicen los contenidos, debe atraer cuanta más atención mejor sobre su trabajo: un servidor no visitado es un esfuerzo vano.
A nivel corporativo, un pequeño núcleo activo con buena relación y comunicación con el resto de la organización suele producir los mejores resultados. Las iniciativas que comienzan por la base (en lugar de las "ordenadas" desde arriba) adecuadamente canalizadas son las que mayores garantias reunen. Los mejores servidores WWW son producto del entusiasmo de un grupo inicial y del compromiso posterior de la organización (proporcionado medios, orientaciones y libertad creativa) con el servicio.